En ocasiones, las manzanillas son sometidas a períodos de crianza excepcionalmente prolongados, en los que la flor llega a debilitarse ligeramente, provocando un pequeño nivel de oxidación y una mayor complejidad, surgen así las “Manzanillas Pasadas”. Vinos con más estructura, pero con todo el carácter punzante e intenso propio de la crianza biológica.